Batallón multinacional CBRN, la primera unidad conjunta en la historia de la OTAN
El secretario general de la OTAN, George Robertson, activó en Bruselas, a principios del mes en curso, el Batallón Multinacional de Defensa Química, Biológica, Radiológica y Nuclear, conocido bajo la abreviatura inglesa CBRN (Multinational Chemical, Biological, Radiological and Nuclear Defence Battalion). Se trata de la primera unidad conjunta en la historia de la OTAN. Los aliados encargaron su creación a la República Checa reconociendo la rica experiencia en descontaminación e investigación química de las Fuerzas Armadas checas. ¿De dónde deriva esta experiencia checa? ¿Cómo surgía y cómo funcionará el Batallón CBRN? Y, ¿qué opinan los propios integrantes checos de dicha unidad? Este es el tema de la presente edición de Panorama Checo.
"En la Cumbre de la OTAN en Praga el año pasado se dijo que no se puede ceder ante los terroristas, que hay que luchar contra ellos. Por ello ha surgido el batallón multinacional cuya existencia es la garantía de que seremos capaces de enfrentar la eventual utilización de armas de destrucción masiva y de que los eventuales daños serán mínimos", puntualizó Kostelka.
El Batallón está integrado por 500 soldados de doce países aliados y uno asociado, Rumania. Su núcleo lo forman 160 antiquímicos checos de la guarnición de Liberec, veteranos de dos guerras del Golfo y varias misiones de paz en los Balcanes.El Batallón forma parte de la Fuerza de Respuesta de la OTAN. Tras obtener la Capacidad Operacional Completa, en julio de 2004, será capaz de intervenir en cualquier parte del mundo en el plazo de cinco días tras la petición de su envío. Su mando y ubicación son rotativos; la primera rotación, hasta julio de 2004, fue encomendada precisamente a la República Checa.
Cuando la OTAN decidió sobre la necesidad de crear una fuerza de respuesta a una amenaza real y omnipresente del uso de armas de destrucción masiva por grupos terroristas, se estudiaba cuál país aliado contaba con mayor experiencia. Más dijo a Radio Praga el comandante de las tropas antiquímicas checas, Dusan Lupuljev.
"No hay muchos países aliados con mucha experiencia en este campo. Además de nuestro país se trata de Estados Unidos, Gran Bretaña y Alemania. Pero como la República Checa demostró un alto nivel profesional durante las dos guerras del Golfo y en los últimos trece años invirtió enormes recursos financieros en los equipos técnicos e investigación, la elección recayó sobre ella".¿Qué tipo de experiencia fue adquirida por los antiquímicos checos en el Golfo que a la vez fue aplicada en el Batallón de Defensa Antiquímica?
"Llevamos a práctica la idea de que no vale la pena crear grandes unidades monofuncionales, por ejemplo, una compañía de descontaminación destinada tan sólo a eso. En Kuwait tuvimos una experiencia muy buena con una unidad multifuncional capaz de descontaminar, detectar, analizar, desinfectar y explorar".
Según el general Dusan Lupuljev, la humanidad no se verá confrontada en el futuro con amenazas de grandes dimensiones desde el punto de vista territorial, por ejemplo, con una contaminación de miles de kilómetros cuadrados de tierra, para las que se exigirían grandes unidades especializadas. "Enfrentaremos incidentes limitados territorialmente, pero para su liquidación deberemos enviar una unidad que contará con todas las capacidades necesarias", matiza Lupuljev y agrega que la República Checa es el único país que tiene experiencia con una unidad semejante.
El ministro de Defensa checo subrayó que el Batallón no está entrenado solamente para el despliegue a conflictos bélicos. Estará preparado también para ayudar a liquidar las consecuencias de catástrofes naturales o averías industriales con presencia de sustancias químicas, biológicas, radiológicas o nucleares.
Radio Praga hizo un sondeo de opinión entre los propios soldados checos del Batallón Multinacional CBRN. Todos son a la vez efectivos de las tropas antiquímicas checas. Aunque sienten orgullo por haber sido escogidos para formar parte del Batallón, coinciden en que en su rendimiento no cambia nada.
"Integrar el Batallón significa para nosotros seguir haciendo el trabajo habitual. Nosotros, los soldados antiquímicos, nos sentimos como unos de los mejores del Ejército checo. Llevo un año en las tropas antiquímicas checas y con ellas vinculo mi futuro y mi carrera", sostiene el brigada Martin Rotis, efectivo del apoyo logístico.
También el teniente mayor, Juraj Szentiralyi, miembro del destacamento médico, está orgulloso de haber sido incorporado en el Batallón. "Sirvo en las tropas antiquímicas checas desde 1987, estuve dislocado en los hospitales de campaña en Afganistán e Irak. Espero aprovechar mis conocimientos en este Batallón y, sobre todo, entregarlos a los más jóvenes", agrega Szentiralyi.
El médico Petr Lipavský explica el porque se enroló en las tropas antiquímicas.
"Yo siempre he querido combinar la química y la medicina y por ello ser miembro del batallón antiquímico como médico me parece ideal. Sirvo aquí desde 1999 y participé en tres misiones extranjeras, en SFOR en los Balcanes, en Kuwait e Irak".
Durante la inauguración solemne del Batallón CBRN, el ministro de Defensa, Miroslav Kostelka, logró captar los sentimientos de la gente de todo el mundo que desea vivir en paz.
"Deseo que los integrantes de esta unidad no tengan que demostrar nunca sus capacidades de liquidar las consecuencias de un ataque terrorista. Sin embargo, la existencia de la unidad debe ser el mensaje a todos que quieran probar el nivel de preparación de la Alianza en este sentido. Confío en que el Batallón Multinacional de Defensa Química, Biológica, Radiológica y Nuclear contribuirá a la seguridad mundial".