Aumenta número de muertos en accidentes de tránsito

El número de muertos en las carreteras checas volvió a crecer. Y ello a pesar de la introducción de rígidas normas de tránsito el año pasado y de la realización de frecuentes operativos policiales.

De acuerdo a las estadísticas policiales, en el curso del mes de marzo murieron en las carreteras checas más de 70 personas a causa de accidentes de tránsito. El año pasado fueron 67 las víctimas en las carreteras durante el mismo período, mientras en los primeros tres meses del presente año, murieron en accidentes de tránsito en la República Checa 13 personas más que en 2006. Los especialistas advierten ante el peligroso aumento de accidentes graves. Indican que las nuevas normas de tránsito, que fueron adoptadas en julio de 2006, y que son mucho más rígidas que las anteriores, no surten el efecto esperado.

Según datos policiales, los conductores más indisciplinados se registran en las regiones del este y sudoeste del país. Para enmendar la situación, la Policía puso en marcha frecuentes operativos policiales y ha ubicado un mayor número de radares en las carreteras y dentro de las ciudades.

Desde comienzos de año se han realizado 234 operativos en las carreteras nacionales, informó el portavoz de la presidencia policial, Pavel Hanták. "Hemos multado a miles de conductores por no respetar la velocidad máxima permitida o por violar otras normas del tránsito, pero el número de muertos no disminuye", apuntó Hanták.

El vice primer alcalde de Praga, Rudolf Blazek, está convencido, no obstante, que la prevención es el mejor método para evitar más accidentes.

"La instalación de radares en las carreteras, por ejemplo, obligará a los conductores a disminuir la velocidad para no ser multados, lo cual es positivo. Los policías de Praga obtuvieron recientemente más de veinte nuevos radares y creo que las altas multas a los conductores llevarán paulatinamente a elevar la seguridad en las vías del país", dijo Blazek.

Por su parte, los psicólogos insisten que mientras los conductores no cambien su actitud agresiva en las calles y carreteras, la situación no mejorará. Y ello independientemente de las rígidas reglas del tránsito, del número de radares y de los operativos policiales que se realicen.