Antiguo periodista de la Radio Checoslovaca nombrado nuevo ministro de Cultura iraquí
Los caminos del destino son enmarañados y la vida nos depara a veces sorpresas inimaginables. ¿A quién de la Radiodifusión Checa para el Exterior se imaginaría que uno de sus antiguos colaboradores alcanzaría la Cartera de Cultura en el nuevo Gobierno iraquí?
Mufíd Jazairi es un iraquí que estudió periodismo en la antigua Checoslovaquia y en los años sesenta y setenta trabajó en la Redacción árabe de la Radiodifusión Checoslovaca para el Exterior. Sus colegas le recuerdan como un chico guapo y amable que dominaba perfectamente el idioma checo e hizo bien su profesión.
En Checoslovaquia conoció a su esposa, periodista de la Radio Checa que realizó muchos reportajes en Israel y los países árabes. También su hijo se dedica al periodismo: como reportero de la Televisión hace reportajes sobre todo en Rusia y Chechenia.
Mufíd Jazairi pasó muchos años en Checoslovaquia pero nunca ha olvidado su patria. Cuando Sadam Husein llegó al poder y empezó a aterrorizar a sus habitantes, Mufíd regresó a Kurdistán donde se sumó a la oposición. Durante diez años militó en el Partido Comunista y participó en actividades clandestinas.
A Bagdad regresó en abril del año en curso, tras la caída de Sadam Husein. Inmediatamente se involucró en la vida política de la nueva administración iraquí. En el Gobierno interino de Irak, nombrado esta semana, le fue conferida la Cartera de Cultura.
Todos los integrantes de la Radiodifusión Checa para el Exterior le desean que el nuevo Gobierno logre su tarea principal: garantizar la estabilidad y la seguridad en su país, acosado en los últimos decenios por la dictadura de Sadam Husein.