Ante la inflación, Praga limitará la iluminación de calles y monumentos históricos
La Alcaldía de Praga reducirá el uso de energía eléctrica, por lo que limitará la iluminación de ciertas partes de la ciudad y de monumentos históricos.
De noche, con sus faroles de luz tenue y cálida, la ciudad de Praga parece convertirse en un cuadro de Jakub Schikaneder. Sin embargo, la cara nocturna de la capital checa está a punto de cambiar, ya que el contexto inflacionario obliga a las autoridades locales a replantearse el sistema de alumbrado público.
En efecto, con una inflación interanual cerca del 14%, la ciudad no tuvo más opción que hacer a un lado el aspecto estético de las calles y monumentos, para centrarse en la eficiencia del sistema eléctrico.
La Alcaldía se plantea una iniciativa que consistirá en reducir la iluminación de algunas partes de la ciudad. Al mismo tiempo, unos 140 monumentos históricos comenzarán a quedar a oscuras más temprano de lo habitual. Así lo explicó el concejal Jan Chabr.
“La iluminación especial de monumentos se apagará a las 11 de la noche en verano y a las 10 en invierno. En los meses de invierno, incluso podemos considerar apagar las luces a las 9 de la noche”.
De esta manera, las luces de Petřín y del Rudolfinum, entre otros tantos sitios destacados de la capital, podrían dejar de destacarse en la oscuridad en los próximos meses. Sin embargo, esta nueva política no afectará al complejo del Castillo de Praga, que administra su propio sistema de iluminación.
La decisión de las autoridades locales responde a números alertadores: la ciudad estima que pagará cerca de más de 800.000 euros en la próxima factura de electricidad, el doble de lo abonado en el período precedente.
Para reducir el consumo eléctrico, las autoridades planean utilizar fuentes de luz LED y sistemas inteligentes de control de iluminación. Tomáš Jílek, director de Technologie, la empresa a cargo de la iluminación de Praga, brindó detalles sobre cómo impactará esta decisión en las calles.
“Este nuevo sistema de iluminación pronto aparecerá en algunas zonas de Praga, como las calles V Holešovičkách, 5. května y Liberecká. Nuestro objetivo es ahorrar costos en cada ubicación”.
Al limitar la iluminación de monumentos y sitios históricos, la ciudad estima que ahorrará alrededor de 81 000 euros, un número poco significativo con respecto al gasto total. Por esta razón, el nuevo sistema descrito por Jílek resulta fundamental para bajar considerablemente la factura anual.
En este sentido, la llamada iluminación biodinámica ya se utiliza en algunos parques de la ciudad, como es el caso de Ladronka. Este sistema ha reducido el consumo en un tercio. Las autoridades esperan que la instalación de luces LED y de paneles solares aceleren la reducción de los costos de iluminación en los próximos meses.
