Un mes de cine cubano en el Cervantes

Con la proyección de dos películas de Humberto Solás, ‘Barrio Cuba’ y ‘Miel para Oshún’, comenzó el pasado jueves una retrospectiva de cine cubano en el Instituto Cervantes de Praga. El ciclo se extenderá todo el mes de junio.

Son ocho películas que resumen la tradición cinematográfica de Cuba. El Instituto Cervantes de Praga, en conjunto con la Embajada de Cuba en la República Checa, han decidido de esta manera rendirle un homenaje al medio siglo de existencia del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos –ICAIC- y, de paso, recordar la figura de Humberto Solás, fallecido el año pasado.

David Čeněk, crítico e historiador de cine, fue el encargado de inaugurar esta muestra de cine cubano.

“El ciclo incluye ocho películas que retratan más o menos la historia del cine cubano desde la revolución del año 1959. Entonces tenemos las películas de Humberto Solás y de Tomás Gutiérrez Alea, que son los dos cineastas cubanos más conocidos e importantes”.

David Čeněk sostuvo que, aparte de Solás y Gutiérrez Alea, hay otros directores que pueden resultar interesantes para el público checo.

“Por ejemplo, está la película que se llama ‘El brigadista’, de Octavio Cortázar. Este director estudió cine aquí en Praga, en la FAMU, y después hizo este filme sobre la alfabetización de los campesinos cubanos en los años 50. Y es interesante porque está influida por el neorrealismo italiano”.

Bárbara Montalvo, foto: Gonzalo Núñez

En la inauguración del ciclo también estuvo presente Bárbara Montalvo, encargada de negocios de Cuba en la República Checa, quien recordó la figura de Humberto Solás. Con películas como ‘Lucía’ (1968) y ‘La cantata de Chile’ (1975), Solás fue figura clave en el desarrollo del Nuevo Cine Latinoamericano.

Montalvo destacó la importancia del cine de Humberto Solás y en especial de ‘Barrio Cuba’ (2005), que retrata las dificultades que presenta la vida cotidiana en su país.

“Barrio Cuba’ es también Cuba y ‘Barrio Cuba’ es también expresión de la honestidad y del compromiso de hombres que como Humberto Solás han hecho una contribución invalorable al desarrollo de la cultura cubana. Y para los cubanos, cultura es también defensa de nuestra nación y de nuestra patria”.

Por su parte, David Čeněk también quiso resaltar el legado de Humberto Solás, cuya muerte el año pasado enlutó a los cinéfilos latinoamericanos.

“El tema de casi todas sus películas es la identidad cubana y cómo los cubanos luchan en contra de la realidad histórica, es decir, buscan la identidad de su país y de sí mismos en contra de todos los acontecimientos políticos de la historia de la Cuba moderna y socialista”.

Y si bien ‘Fresa y chocolate’, también presente en el ciclo, no necesita introducción, porque es una de las películas cubanas más conocidas y premiadas de los últimos tiempos, Čeněk sí quiso mencionar el otro largometraje de Gutiérrez Alea que se exhibirá en esta retrospectiva.

“Y ‘Memorias del subdesarrollo’, bueno, es una maravilla. Que ganó en el año 1968, en la República Checa, el Gran Premio en el Festival de Karlovy Vary. Es la película que retrata la historia de Cuba, lo que pasó después de la revolución. La huida de los cubanos y la transformación de la sociedad”.

En el marco de este ciclo, David Čeněk, un especialista en cine latinoamericano y profesor de la Universidad Carolina de Praga, dará tres charlas sobre la evolución del cine cubano del último medio siglo.

Ciclo de cine cubano

* El brigadista (1977), de Octavio Cortázar. 11 de junio, a las 17 horas.

* Hormigas en la boca (2004), de Mariano Barroso. 11 de junio, a las 19 horas.

* El hombre de Maisinicú (1973), de Manuel Pérez. 18 de junio, a las 17 horas.

* Madagascar (1994), de Fernando Pérez. 18 de junio, a las 19 horas.

* Memorias del subdesarrollo (1968), de Tomás Gutiérrez Alea. 25 de junio, a las 17 horas.

* Fresa y chocolate (1993), de Tomás Gutiérrez Alea. 25 de junio, a las 19 horas.

Las funciones se realizan en el Instituto Cervantes de Praga. Las películas son en español, con subtítulos en inglés. La entrada es gratuita.