Rovník Records: un estudio de grabación con raíces españolas en la capital checa
Hace un año, Ricard Tejada, un músico español afincado en Praga, comenzó con su proyecto Rovník Records, un estudio de grabación donde intenta aportar lo mejor del sonido retro a las bandas que allí graban.
Praga es una de las capitales culturales más reconocidas de Europa, donde encontramos música y otras formas de arte en cada esquina.
Cada año nacen infinidad de proyectos musicales en la capital checa, y algunos de ellos tienen un origen hispanohablante. Es el caso de Ricard Tejada, un músico español nacido en Badalona que hace casi cuatro años llegó a Praga.
En Radio Praga pudimos hablar con él, y nos contó un poco más acerca de su historia y de los proyectos musicales en los que se encuentra inmerso en la actualidad.Ricard llegó a Praga a través de una gira de la cantante Amparo Sánchez, a la que acompañaba tocando el contrabajo. Y tras llevarse una buena impresión de la ciudad, decidió al cabo de un tiempo mudarse a la República Checa para continuar con su actividad artística.
En Chequia, Ricard se dedica a varios proyectos, uno de ellos es su actividad como Ricardo Rivera, el seudónimo que utiliza cuando toca rumba, uno de los estilos que lleva en sus raíces y con el que realiza diversos conciertos en la capital checa.
La rumba es una de sus pasiones, pero como él mismo afirma, después de tanto tiempo dedicado a un mismo estilo, siente la necesidad de buscar sonidos nuevos.
“Estoy trabajando para grabar el primer disco de Ricardo Rivera. Llevo mucho tiempo pensando acerca de eso, pero no creo que vaya a ser un disco de rumba, porque ya llevo mucho tiempo con la rumba, y me gusta mucho ese sonido, pero me gustaría probar con sonoridades nuevas. Entonces estoy pensando en hacer esas mismas canciones, pero con arreglos y sonoridad de calipso”.
A la búsqueda del sonido retro
No obstante, una de las tareas que más tiempo le consume en la actualidad es el estudio de grabación Rovník Records, que fundó hace un año y por el que estima que han pasado alrededor de veinte artistas diferentes.
"El principal objetivo del estudio Rovník es intentar buscar el sonido retro, antiguo. El sonido es mucho más cálido y más agradable que grabar directamente en el ordenador”.
“Otro proyecto en el que estoy metido es Rovník Records, es un estudio de grabación que está cerca del metro de Palmovka, junto al puente de Libeñ. Y allí pues me dedico a grabar a bandas locales, también hago mezclas y un poco de mastering”.
Para Ricard, en cuyo estudio se han grabado a artistas de estilos muy diferentes, una de las señas de identidad de Rovník Records es el sonido retro. Un sonido que busca a través de aparatos analógicos, como él mismo nos explica.
“El principal objetivo del estudio Rovník es intentar buscar el sonido retro, antiguo. El mejor aparato que hay en el estudio es un grabador de cinta abierta, de cinta magnética, una Tascam de 16 pistas, y entonces preferiblemente todo lo que se graba en el estudio pasa por ese aparato. No tiene nada que ver con la tecnología digital, es con lo que se grababa antes. Y el sonido realmente no tiene nada que ver, es muy especial, es mucho más cálido y más agradable que grabar directamente en el ordenador”.
Hoy en día, todo sonido pasa al modo digital en algún momento, ya que el proceso actual y la propagación de la música están estructuradas de esa manera. Sin embargo, Ricard intenta que las grabaciones sufran esa conversión al digital lo más tarde posible.
“En el estudio, tarde o temprano, en la cadena del procesado del sonido, estamos pasando por un ordenador, ¿no? Y al fin y al cabo esa música va a acabar volando a través de Internet y se va a convertir en datos. La vas a subir a Youtube, y ellos van a aplicar compresión, o la vas a enviar por email y vas a hacer un mp3. Sin embargo, cuanto más tarde sea este proceso de conversión al digital, mejor”.Aunque Ricard reconoce la utilidad y la importancia del audio digital, insiste en que el analógico se ajusta mucho mejor a los estilos musicales que le gustan. De hecho, como señala, le gustaría tener un estudio que fuese analógico en su totalidad.
“Evidentemente, desde la aparición del digital han nacido géneros de música que su personalidad y su identidad se basan en el sonido del digital, pero para la música que a mí me gusta, prefiero usar el analógico. Mi sueño es tener un estudio completamente analógico”.
Entre los grupos que han pisado su estudio se encuentran, por ejemplo, Rumbalgia, el rapero etíope Linken, el conjunto de jazz Pražská dixielandová společnost y la Cumbia Cooperativa.
Los orígenes del ska
Recientemente, Ricard Tejada comenzó a participar en un nuevo grupo. Se trata de Czech Ska Committee, donde junto a músicos checos quiere realizar un tributo a la banda The Skatalites. Este grupo se hizo famoso por popularizar el ska catalizando todas las influencias musicales de las Antillas, así como las que procedían del RnB de los Estados Unidos.
“El tercer proyecto que tengo en marcha es una banda con la que estamos haciendo tributo a Skatalites. The Skatalites es una banda jamaicana que, digamos, ellos se atribuyen el inicio del ska como género musical. A finales de los años 50, este grupo se convirtió en la banda que fue capaz de traspasar las fronteras de Jamaica y esparcir la música ska por el resto del mundo”.
Los temas que Czech Ska Committee interpreta fueron transcritos por Josep Blanes, apunta Ricard.“La banda somos siete. Hay sección rítmica: bajo, batería, teclado y guitarra. Y luego hay tres metales: trombón, saxo tenor y trompeta. Un compañero mío de Barcelona, Josep Blanes, se dedicó a transcribir canciones originales de Skatalites para metales, él me pasó los arreglos, y estamos de momento haciendo homenaje a Skatalites”.
Por el momento, Ricard Tejada sigue trabajando duro para llevar adelante estos proyectos. Esperamos ver pronto sobre los escenarios a Czech Ska Committee.
Para las bandas praguenses que busquen sonidos más antiguos, Rovník Records puede ser una gran oportunidad para experimentar con los sonidos analógicos. De igual manera, para los músicos hispanohablantes de la capital checa es bueno saber que pueden colaborar y compartir su pasión por la música en su propio idioma.