"Nunca me siento satisfecho con mí mismo"

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Nuevos talentosos músicos irrumpen en los escenarios checos. Uno de ellos es el violinista Miroslav Ambros de 19 años, que acaba de presentar al público su primer disco compacto.

Para su primer álbum titulado "Il Virtuoso", Miroslav Ambros eligió composiciones de Nicolo Paganini, Fritz Kreisler, Josef Suk, Antonio Bassin, Sylvie Bodorová, y también del compositor y violinista español Pablo de Sarasate.

"En el disco figuran composiciones de grandes maestros del violín. Su interpretación no fue fácil, puesto que requiere una técnica de tocar brillante. A pesar de ello, la grabación del disco fue para mí una gran alegría, también gracias a la cooperación con otros músicos que me resultó muy inspirativa".

Al violinista acompaña en el piano su madre, la experimentada música checa Zuzana Ambrosová. "Grabar un disco en compañía de mi madre fue siempre un gran sueño para mí. Se merece todo mi agradecimiento, puesto que a ella le debo mi afición por la música", sostuvo Miroslav Ambros, quien comenzó a tocar a los diez años. Gracias a su inmensa laboriosidad y talento pronto comenzó a ofrecer conciertos.

"El violín es un instrumento mágico. Con él uno es capaz de expresar toda una gama de sentimientos. Por otro lado, tocarlo bien requiere mucho tiempo y amor. A pesar de ello, nunca me siento satisfecho de mí mismo. El mundialmente reconocido violinista ruso David Oistrakh solía decir que uno nunca puede lograr una perfección absoluta."

En años anteriores, Miroslav Ambros ya se presentó al público exterior. Ofreció conciertos en Francia, Italia, Alemania, Austria, y otros países.

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