Las universidades checas reforzarán las medidas de seguridad

Representantes de las universidades, los Ministerios de Educación e Interior y la Policía, debatieron este miércoles sobre las nuevas medidas de seguridad que se aplicarán en las escuelas superiores de Chequia.

En Praga comenzó este jueves la actividad ‘Un mes por la facultad’, que quiere ayudar a los estudiantes, profesores y público en general a superar los impactos del tiroteo de diciembre en la Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina, en el que 14 personas fallecieron y 25 resultaron heridas, algunas de gravedad.

Milena Králíčková, rectora de la Universidad Carolina, informó que el edificio de la Facultad de Filosofía permanecerá cerrado hasta finales de enero como mínimo y que las clases tendrán lugar en otras facultades e instituciones públicas que ofrecieron sus espacios.

Milena Králíčková y Mikuláš Bek|Foto: Kateřina Šulová, ČTK

Mientras tanto, en el Ministerio de Educación se reunieron este miércoles representantes de las universidades checas, del Ministerio del Interior y la Policía, para debatir sobre las medidas de seguridad que se aplicarán en los centros de enseñanza superior en Chequia. Como dijo el ministro de Educación, Mikuláš Bek, su cartera colabora con expertos del extranjero y los cambios abarcarán, por ejemplo, las dimensiones de los bultos que una persona podrá introducir a un centro de enseñanza.

“En Estados Unidos, por ejemplo, está dado que no se puede llevar a un campo universitario bultos de gran tamaño. Estos deben ser depositados en una cámara especial o en una habitación vigilada”.

Bek apuntó que los cambios en las medidas de seguridad hay que adoptarlos también en las escuelas de enseñanza básica y media.

“La metodología que rige hasta ahora permitía que a las escuelas entraran personas desconocidas. Ahora debemos contar con la posibilidad de que también alguien que de forma regular acude a las clases puede representar un peligro para la seguridad”.

El ministro acotó que su cartera elaborará un manual para los centros de enseñanza sobre los procedimientos a seguir en caso de algún riesgo grave y se llevarán a cabo cursos intensivos de seguridad para los estudiantes y los empleados de los centros universitarios.

Foto ilustrativa: Filip Jandourek, Český rozhlas

Como añadió para la Radio Checa Tereza Fojtová, portavoz del Ministerio de Educación, lo importante es que las medidas de seguridad sean coordinadas.

“Consideramos oportuno que el tema de la seguridad sea debatido de forma compleja, y no sólo por la tragedia ocurrida en la víspera de las fiestas de Navidad. Debemos coordinar las medidas que adoptaremos”.

El rector de la Universidad de Economía, de Praga, Petr Dvořák, planteó la necesidad de asegurar las entradas a los edificios con marcos de seguridad.

“La libertad y la apertura de las Universidades no tiene relación alguna con el hecho de que es necesario tener bajo control quién entra al edificio de la universidad”.

Las universidades podrán proceder de forma individual y adoptar de nuevas medidas de seguridad. De acuerdo con la rectora de la Universidad Carolina, Milena Králíčková, no cuentan por el momento con marcos de seguridad, sino que cada una de las facultades aplicará medidas individuales.

“Las medidas no implican solo la instalación de algo en algún lugar. Por ejemplo, cámaras para detectar bultos de mayor tamaño. Lo fundamental es contar con especialistas que, en cooperación con el Ministerio del Interior y la Policía, analicen cual medida de seguridad es la más conveniente y efectiva para cada uno de los edificios de los centros educativos, cuál opción reducirá al mínimo los riesgos”.

Junto al Carolinum, sede principal de la Universidad Carolina, así como en la Facultad de Filosofía, permanecen miles de velas, colocadas por los ciudadanos en honor a las víctimas del tiroteo. De acuerdo con Otomar Sláma, jefe del estado de crisis de la Universidad Carolina, de las velas, flores y mensajes podría surgir una obra artística en el futuro. Sláma anunció además que hasta el presente los ciudadanos enviaron a la Fundación de la Universidad Carolina unos 3 millones de euros para las familias de las víctimas del tiroteo.