De los muertos no se habla
“¿Qué hay después de la muerte? No sabemos. Antes hay teatro.” El dramaturgo mexicano Juan Manuel García Belmonte acaba de dirigir en Praga una función sobre las diferencias que hay entre Chequia y México en cuanto a la postura frente la muerte.
“Estar buscando sobre las heridas personales, eso me interesa mucho”.
Juan Manuel García Belmonte
Procedente de la cuna teatral mexicana, la ciudad de Guanajuato, el dramaturgo, director de teatro y periodista Juan Manuel García Belmonte hizo una residencia durante el mes de abril en la ciudad de Praga.
Vino invitado por el grupo de teatro checo-alemán Spielraum Kollektiv, que había visitado México en 2017. Durante esta primavera, juntos armaron un proyecto sobre las visiones de la muerte en México y en República Checa.
“Empezamos hacer este trabajo que se llama tentativamente De los muertos no se habla. ¿Por qué? Porque en República Checa, lo que conozco, parece que la muerte sigue siendo un tema quizás un poco tabú y en México es totalmente diferente. Siempre hablamos de los muertos, siempre los muertos están presentes aunque se hayan ido. Hacemos un día de muertos, la muerte es colorida, nos reímos de ella, hablamos de ella todo el tiempo aunque nos de miedo. De eso fue el proyecto”.
“En República Checa parece que la muerte sigue siendo un tema quizás un poco tabú y en México es totalmente diferente”.
Juan Manuel García Belmonte
García Belmonte realizó con los artistas checos talleres del teatro biográfico, el teatro documento y también intercambiaron algunas referencias literarias, por parte de García Belmonte se trataba hablar, sobre todo, de Octavio Paz, Juana Inés de la Cruz o Juan Rulfo.
El resultado se pudo ver en el Museo de arte contemporáneo DOX y en el teatro Na zábradlí. A continuación, debería presentarse en festivales y también viajar a México.
El teatro checo versus el mexicano
Cuenta García Belmonte que durante la residencia en Praga pudo observar algunas diferencias entre la práctica teatral mexicana que sigue siendo más tradicional, más de texto, mientras que en Chequia se tiende más hacia el performance.
“Por ejemplo, lo que he visto en República Checa, es que están más vinculados al teatro de imagen, al teatro físico, al performance que es muy interesante, intervenir los espacios. En México no hay mucha práctica de eso. Solo hay algunos colectivos, algunas personas, pero no es necesariamente así. Todavía estamos vinculados a otro tipo de tradición teatral aunque sí hay teatralidades en todos los sentidos”.
Escribir desde el incendio
Además de estrenar el proyecto De la muerte no se habla, García Belmonte presentó en Praga su libro Escribir desde el incendio, publicado en 2022 en México, que comprende cuatro piezas escénicas: La nueva ciencia, El frío de las ovejas, El inicio de las cosas y Catálogo de lo incierto.
“Una civilización que niega a la muerte, acaba por negar a la vida”.
Octavio Paz
La obra fue escrita durante la pandemia del COVID-19, lo cual enfatiza también la autora del prólogo Silvia Peláez, citada durante el evento de la presentación en Praga por la embajadora de México, Leonora Rueda.
“¿Y cómo escribir si no es desde lo incierto, lo improbable y lo contingente cuando lo que pensábamos estable, fijo, constante se ha vuelto permeable, variable y precario?
Explica García Belmonte que las cuatro piezas inciden de nuevo el teatro documento, el biodrama y el teatro distópico donde se usan pocos diálogos. No obstante, en sus obras nadie es completamente malo y nadie es completamente bueno. Según dice, sus textos expresan un gran amor por la vida igual que el dolor sobre lo que ocurre a nuestro alrededor. ¿Y quiénes son sus protagonistas?
“Estar buscando sobre las heridas personales, eso me interesa mucho. Me interesa mucho ver de los antihéroes, de los que pierden, de los que nunca les va bien, de los que parece que siempre están en el filo de la navaja o en la cuerda floja, siempre cayéndose y siempre intentando resolver. Estos personajes me parecen muy interesantes.
El libro presentado lleva también una importante huella checa, ya que el diseño, la cubierta y las fotos incluidas en su interior fueron hechos por el diseñador, escenógrafo y fotógrafo checo Michal HōR quien colabora con Spielraum Kollektiv y creó la escenografía para De los muertos no se habla.
“El concepto gráfico y las fotografías las hizo un artista checo que se llama Michal HōR, lo cual fue muy importante. Por ejemplo, él no habla español, lo entiende pero no lo habla y no lo lee. Entonces las fotos, de pronto, pareciera que nada tienen que ver pero sí van casando un poco con el concepto de estas obras que hablan más sobre la distopía, la desesperanza”.
Concluye García Belmonte que le gustaría continuar colaborando con los artistas checos en Praga en el futuro. Mientras tanto, estará esperando que se pongan las funciones de De la muerte no se habla en México.
