Coleccionista prepara la apertura del primer museo de móviles en Chequia
Los primeros teléfonos móviles aparecieron en Chequia a comienzos de los años 90 del siglo XX. Con el desarrollo de las tecnologías, pasados tres decenios esos teléfonos ya son historia, por lo que un coleccionista checo prepara la instalación del primer museo de celulares en este país.
Hace unos tres años que el checo Zdeněk Lukavec, de la ciudad de Třebíč, decidió coleccionar teléfonos móviles. Fue uno de los primeros checos que a comienzos de los años 90 disponía de un celular.
Más tarde lo cambió por otro más moderno y ese por otro más, pero algunos de los anticuados los guardó en casa. Un día los encontró en un armario y se le ocurrió comenzar a coleccionar estos aparatos. Lo primero que hizo fue tratar de conseguir algunos de los más antiguos, según contó Zdeněk Lukavec a Radio Praga Internacional.
”Muchos se olvidaron ya de cómo eran los primeros móviles. Se me ocurrió conseguir el primer teléfono que tuve en mi adolescencia y fue así como comenzó todo. Se trataba de un Nokia 5110. Las funciones de las que disponen los celulares en la actualidad, a comienzos de los aňos 90 no existían todavía”.
Lukavec expuso los primeros teléfonos móviles de su colección en la oficina de su empresa. La muestra se fue extendiendo con el tiempo. Entre otros aparatos dispone de celulares de varios kilos de peso que se asemejaban a una pequeña maleta y fueron lanzados al mercado checo poco después de los cambios democráticos de 1989, según indica el coleccionista.
”En mi colección, naturalmente, tengo también celulares en forma de pequeňos maletines. Dispongo incluso de uno de sus modelos más antiguos que data del aňo 1997. Es un Nokia Talkman 320 F que pesa 4.7 kilos. Claro, actualmente eso es inimaginable cuando disponemos de móviles pequeňos y livianos”.
Los celulares marca Nokia forman la mayor parte de la colección de Zdeněk Lukavec, pero uno de los modelos no ha logrado conseguirlo hasta el presente, según reconoce.
”Se trata concretamente del Nokia Mobira Senator, el primero de los celulares-maletines, lanzado al mercado por esa compañía en 1982. A pesar de tratarse de un móvil, pesa 9.8 kilos. Conseguir ese aparato es muy exigente. Cuando encuentro alguno que llegó a conservarse, su precio es tal que no me lo puedo permitir. El último modelo que llegué a descubrir se vende por unos 3500 euros”.
En el futuro más cercano Zdeněk Lukavec planifica la apertura del primer museo de celulares en la República Checa. Actualmente está negociando con las autoridades del distrito de Třebíč sobre el lugar donde podría instalarlo. Mientras tanto planifica exponer su colección de celulares en agosto próximo en un encuentro de automóviles-veteranos y coleccionistas en la localidad de Hrotovice.
”La exposición está planificada para el 22 de agosto en Hrotovice, en el marco del evento denominado ‘Hrotovický koločas’. Allí quiero presentar al menos una parte de mi colección. Pero más que organizar exposiciones quiero conseguir abrir un museo de celulares, el primero en la República Checa. Allí quiero instalar todos los aparatos antiguos de los que dispongo, y no tener que trasladarlos de un lugar a otro”.
Zdeněk Lukavec afirma que con el paso del tiempo se fue enamorando cada vez más de los celulares antiguos. Dice que los iPhone llegaron a aburrirle y, en vista de que la mayoría de los celulares de su colección son funcionales hasta el presente, pasó a utilizar algunos. Su aparato preferido es el Nokia 5110 que compró en una tienda-bazar por 22 euros. Insiste en que es mucho más entretenido que los celulares de más de 1000 euros.
