Ciencia
"En la sierra de Beskydy vuelan águilas eslovacas", "Empieza el boom de juegos para móvil", "Los microorganismos serían capaces de hacer peligrar la seguridad de los depósitos de desechos nucleares"- éstos son los temas que abordaremos en esta edición.
Águilas reales en la sierra de Beskydy
De la cría de los polluelos se encargó la hembra de águila Dima, que vive en cautiverio desde 1977, tras haber sido herida de un tiro. Dima recibió a las jóvenes águilas con gusto. Después de ser colocados en su nido los dos polluelos más pequeños, se puso a calentarlos y a alimentarlos. El papel de Dima es esencial en el proyecto.
En estos días se está preparando el traslado de las jóvenes rapaces a una jaula en la sierra de Beskydy en la que crecerán. Después serán liberadas en la naturaleza. Desde hace diez meses vive en las montañas de Beskydy otro grupo de águilas, nacidas el año pasado, que también fueron criadas en cautiverio.
Juegos para móvil
Los expertos informáticos checos que desarrollan juegos para teléfonos móviles hacen buenos negocios tanto en el extranjero como en el mercado nacional. Sus juegos para móvil son conocidos por clientes de EE UU, Alemania, Israel, Polonia y Turquía.
A la República Checa se dirigen también grandes compañías extranjeras. Ahora llega el grupo mediático Disney, para cuya filial alemana unos 60 programadores checos desarrollarán en Praga juegos para móvil, destinados a los mercados de Europa y de Estados Unidos.
El diario económico Hospodárské Noviny comenta que los juegos para móviles están registrando el mismo boom que al principio hubo con los juegos de ordenador.
Según las encuestas de los operadores de telefonía móvil, más de la mitad de sus clientes entre los 14 y los 35 años se entretienen con juegos para móviles.
Microorganismos peligrosos para depósitos de desechos nucleares
En la construcción de depósitos de desechos nucleares los especialistas deben tomar en consideración también la actividad de los microorganismos, capaces de sobrevivir en condiciones muy hostiles.
Los microorganismos del grupo Archaea viven en manantiales calientes y en gélidos parajes antárticos, en aguas profundas, en el interior de las rocas o en los desechos de las fábricas.
Los científicos checos estudian capas de piedra calcárea, formadas hace centenares de millones de años, en las que han quedado encerradas las impurezas del aire de aquellos remotos tiempos. Los datos obtenidos permiten conocer la evolución del medioambiente.
Los expertos checos han descubierto que los microorganismos que han vivido o viven en la piedra calcárea han modificado las características de la roca. Los microorganismos cambian al parecer las condiciones en el interior de las rocas para crear un ambiente más propicio para su reproducción.
Si los microorganismos llegasen a modificar sustancialmente las características de un depósito subterráneo de residuos nucleares, excavado en rocas, podría llegar a peligrar la seguridad de toda la instalación, advierten los científicos.
