Ministro del Interior declara que en Chequia no se tortura a los refugiados
La República Checa fue criticada por las supuestas malas condiciones en las que viven los inmigrantes a su paso por el país rumbo a Alemania. El ministro del Interior, Milan Chovanec, invitó a un grupo de diplomáticos europeos a visitar el campo de acogida de Bělá-Jezová para que comprobaran con sus propios ojos qué tipo de trato reciben los refugiados.
El ministro del Interior checo, Milan Chovanec, rechazó toda acusación e invitó al alto funcionario de Naciones Unidas a visitar la República Checa.
Partiendo de la gravedad de las acusaciones el ministro preparó una visita para los diplomáticos europeos acreditados en Chequia, que quisieran comprobar que no se trata de un campo de tortura.
“Las condiciones en el campamento de acogida son mejores que en otros países por los que pasaron los inmigrantes. La situación aquí es muy buena y se puede comprobar que no se trata de un lugar de tortura. Se trata de un centro en el que se encuentran retenidas las personas que no quieren pedir asilo en la República Checa”.
La embajadora de Gran Bretaña, Jan Thompson, se expresó positivamente al comentar lo que encontró en Běla-Jezová.
“Estoy muy satisfecha de haber podido recorrer las instalaciones y comprobar que las condiciones son proporcionalmente buenas. Veo que el Gobierno Checo toma medidas para acondicionar el lugar lo mejor posible”.
Las familias tienen a disposición atención médica y un pediatra atiende a los menores de edad, al tiempo que psicólogos infantiles tratan a los pequeños con el fin de ayudarles a superar traumas de la guerra.
Los diplomáticos europeos dieron a entender que las condiciones en el campo de Bělá-Jezová no se salen de los estándares para semejante tipo de instalaciones.
