Los checos no aprueban en educación cívica y no confían en las instituciones democráticas

La Universidad Masaryk de Brno ha tomado parte en un estudio internacional sobre educación cívica, que ha arrojado como resultado la insuficiente educación cívica y conciencia social de la población. Los expertos que han realizado el estudio lo aseguran argumentando que 21 años después de la Revolución de Terciopelo la participación de los ciudadanos en política es muy escasa y tienen poca confianza en las instituciones. Cuatro de cada cinco electores recibieron su formación académica durante la normalización, después de la ocupación soviética de Checoslovaquia en 1968, dice el estudio.