La Justicia checa necesita tratamiento urgente
La justicia checa debería ser en el futuro moderna, rápida, transparente y confortable. Para lograrlo podría contribuir la propuesta de reforma presentada por el Ministerio de Justicia.
Poner coto a prolongados pleitos judiciales y combatir la amplia burocracia en el sector, estos son los principales propósitos de la reforma, que fue presentada por el ministro de Justicia, Jiří Pospíšil.
“La reforma persigue acelerar la labor de los tribunales, mejorar la comunicación del ciudadano con los órganos judiciales y posibilitarle el máximo acceso a la información. Todo ello pretendemos conseguir con ayuda de medios electrónicos y de informática, de cambios personales y de enmiendas de algunas leyes anticuadas”, afirmó Pospíšil.
El ministro calificó la reforma como necesaria, subrayando que los cambios no requerirán un mayor número de jueces, ni tampoco más gastos para las arcas estatales. A la mayor efectividad de los tribunales checos debería contribuir un amplio control entre los empleados administrativos. El Ministerio pretende disminuir su número y, por otro lado, elevar el de los oficiales del juzgado.
La introducción de los métodos electrónicos debería facilitar, sobre todo, la comunicación de los ciudadanos con los tribunales y mejorar su acceso a la información. La primera fase del proyecto debería entrar en funcionamiento en las próximas semanas. Hasta finales del año 2008 debería introducirse el expediente judicial electrónico, explicó Jiří Pospíšil.Otro pilar de la reforma lo representaría la enmienda de 150 leyes, que debería culminar con la enmienda del Código Civil y del Código Penal. Cambios sustanciales serían introducidos, por ejemplo, en la ley sobre tribunales, sobre jueces, sobre expertos y sobre intérpretes judiciales. Todo ello con la meta de acelerar los procesos.
Sobre el proyecto de la reforma se ocuparán en estos días los expertos en la materia. Sus observaciones, así como otras eventuales modificaciones de la reforma serán presentadas por el ministro Pospíšil en febrero de 2008.
Según las estadísticas, la República Checa es uno de los países con el mayor número de jueces per cápita. En el país, que tiene alrededor de diez millones de habitantes, trabajan más de tres mil jueces.