La historia se repite en Troubky
La desesperación de los ciudadanos de Troubky, las primeras estimaciones de los daños materiales causados por las inundaciones y la receta para distinguir un buen helado. Éstos y otros temas en el resumen de la prensa checa de este miércoles.
El martes a las tres de la madrugada el agua comenzó a penetrar la barrera antiinundación por una grieta de 250 metros de longitud, la misma que la vez pasada.
E igual que en 1997, los bomberos perdieron la lucha contra la naturaleza y más de tres cuartas partes de Troubky terminaron inundadas.
Los ciudadanos de la aldea culpan a las autoridades de no haber construido una protección eficaz contra las riadas. Lo peor de todo es que esa gente ya sabe lo que le espera después de regresar a sus hogares, concluye Právo.
Aunque los números exactos aún se desconocen, está claro que los dos millones de euros destinados por el Estado para paliar los peores daños no serán suficientes, ni mucho menos, indica Hospodářské Noviny.
El Gobierno tiene preparados otros dos millones, pero todo parece indicar que habrá que tocar las reservas, escribe el diario.
Las aseguradoras del país se preparan para recibir miles de partes por los daños en los próximos días. Česká Pojišťovna, líder del mercado de seguros checo, estima que pagará unos 20 millones de euros en indemnizaciones a sus clientes.
El francés está fabricado de yemas de huevo crudas y en Chequia prácticamente no se vende. El italiano destaca por su intenso sabor y textura bastante densa. En su fabricación se utilizan ingredientes auténticos en vez de aditivos químicos. Por su parte, la principal característica de un helado estadounidense es un alto contenido de grasas, que puede llegar hasta al 18 por ciento.
Y, ¿cómo reconocer un buen helado? Lo importante es fijarse en su textura y color. Un auténtico helado debe ser cremoso y de colores naturales, coinciden los expertos en Mladá Fronta Dnes.
El Pilsen consigue con su segunda copa una histórica clasificación para la UEFA Europa League. Hacía 39 años que el equipo no participaba en una competición europea.
El Jablonec por su parte cierra una temporada brillante, pero sin títulos. Finalista de Copa y candidato al trofeo de liga hasta la última jornada, se tiene que contentar al final con sendos subcampeonatos.
