Científicos checos combaten la suciedad por medio de un nuevo nano-detergente

Científicos checos han desarrollado un invento que entusiasmará a todos los que odian hacer la limpieza. Un nuevo detergente, creado a base de la nanotecnología, promete proteger con más eficacia las superficies contra la suciedad.

Foto: RGBstock.com

Ahorrar hasta el 80% del tiempo que hoy día deben dedicar las amas de casa a la limpieza. Eso prometen los expertos de la Universidad Técnica de Liberec a todos los que utilicen su nuevo detergente patentado a base de nanotecnologías, que trata las superficies del suelo, muebles y electrodomésticos de manera que sean mucho más resistentes al polvo y la grasa.

El nuevo depurador aprovecha las nanopartículas de óxidos, en este caso de arena molida muy finamente.

Foto: Ondřej Štemberk PIKATEC

“Este material posibilita crear una superficie resistente al desgaste y las altas temperaturas siendo a la vez permeable al aire. El detergente crea una capa de protección gracias a la que no hará falta limpiar la superficie con tanta frecuencia”, subrayó el jefe del equipo científico, Petr Louda.

El nuevo detergente promete ser más barato y menos contaminante

Como cada superficie es de una característica diferente, los científicos crearon varios tipos de detergentes.

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“La madera tiene una estructura diferente a la de acero, por supuesto. Nosotros cerramos la superficie, entre comillas, pero solo contra la suciedad, porque la misma necesita respirar. Así que modificamos la superficie para impedir la acumulación de la suciedad”, señaló una de las integrantes del equipo científico, Totka Bakalová.

Además de ser más eficaz en la lucha contra la suciedad, el nuevo detergente promete ser más amigable tanto respecto al bolsillo del usuario como al medio ambiente, o sea que será más barato y menos contaminante, según los inventores.

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Aunque algunos expertos señalan que aún no está del todo comprobado que las nanotecnologías sean menos nocivas.

“Las nanopartículas son materias de un impacto controvertido: no se puede decir si son buenas o malas, de todas formas no están aún tan verificadas para que quede claro cómo afectarán al hombre y el medio ambiente en el futuro”, advierte por ejemplo el ecologista Kamil Repeš.