Cada año 230.000 animales se usan para pruebas de laboratorio en Chequia
Las empresas en todo el mundo crían cada año unos 115 millones de animales para experimentos científicos. En los laboratorios checos se utilizan alrededor de 230.000 animales al año.
“Estas empresas crían animales exclusivamente para pruebas de laboratorio. La mayoría son roedores, que se utilizan sobre todo en las pruebas que tienen que ver con la aprobación de nuevos medicamentos. Está prohibido llevar a cabo pruebas con la intención de desarrollar armas o cosméticos”.
Sin embargo, la prohibición no se aplica en algunos tipos de pruebas, como explica Barbora Bartušková Večlová, directora de la organización Libertad de los Animales.
“La prohibición es válida solo para las substancias que se utilizan en la producción de cosméticos, y algunas pruebas están fuera de este marco. Entonces en algunos casos sí puede haber pruebas con los animales. Aún mayor es el problema en lo que se refiere a los detergentes, ya que allí no se aplica la prohibición europea”.
Para orientarse mejor en los productos, los clientes pueden consultar los embalajes, donde se encuentran los certificados. Uno de esos es el certificado HCS con el logo de un conejo saltando. Se trata del único certificado de cosméticos que es vigente en todo el mundo y garantiza que el producto fue fabricado sin pruebas con animales. El número de las empresas checas que solicitan este certificado va creciendo.
Mientras tanto los métodos de pruebas alternativos son igualmente relevantes. Hoy se pueden crear en los laboratorios conjuntos de células que son derivadas de las células humanas.Además, las empresas pueden utilizar en la fabricación de sus productos una gran cantidad de substancias que ya fueron objeto de pruebas en el pasado. También los laboratorios que siguen haciendo pruebas con animales sin fines de lucro hacen esfuerzo para mejorar las condiciones de vida de los animales, sostiene Hana Kubová del Instituto de Fisiología de la Academia de Ciencias de la República Checa.
A pesar de ello, los eurodiputados advierten que las pruebas de cosméticos con animales siguen siendo una práctica común en el 80% de los países miembros. El Parlamento Europeo demanda una prohibición completa hasta el año 2023.