Una Chequia ultramotivada se enfrenta a España en la final de la Copa
La República Checa disputa desde el viernes su primera final de la Copa Davis desde que Checoslovaquia ganara el torneo en 1980 liderada por el mítico Ivan Lendl. Sin complejos ante la favorita España y, presumiblemente, en mejor condición física que sus rivales, intentarán aprovechar su oportunidad histórica.
La incertidumbre de quiénes serían los jugadores españoles que se enfrentarían a la República Checa se mantuvo casi hasta el sorteo del jueves. Problemas físicos en Fernando Verdasco y las molestias que arrastra durante esta temporada la estrella del equipo, Rafael Nadal, alientan a los checos que esperan poder hacer frente al equipo que ha dominado la competición en los últimos años. Jugar en Barcelona, y sobre tierra batida, la superficie preferida de los españoles, completan una serie de circunstancias desfavorables para los checos, ante las que no pierden la fe, sin embargo. Para Radek Štěpánek, el resultado del sorteo o quien integre el equipo español no cambia su manera de afrontar la final.
El escenario ideal para el capitán del equipo checo Jaroslav Navrátil sería “quedar 1-1 tras el primer día, para luego ganar el dobles y meter presión a los españoles”. Efectivamente es en el partido de dobles del sábado donde se sienten más fuertes los checos. Son Jan Hájek y Lukáš Dlouhý el dúo checo previsto para enfrentarse en él a Fernando Verdasco y Feliciano López. El capitán Navrátil podría optar por cambiarlos por Berdych y Štěpánek, al igual que hiciera en semifinales ante Croacia. Štěpánek no tuvo problema entonces para obtener también ese punto tras haber vencido en un agotador duelo de seis horas el día antes contra Ivo Karlovic.
