Políticos checos esperan que la retirada de EE.UU. de Siria ayude a estabilizar la situación

Soldados estadounidenses en Siria, foto: ČTK / AP / Zoe Garbarino

El presidente de EE.UU., Donald Trump, anunció el miércoles que las tropas terrestres de su país se retirarán de Siria. Los políticos checos esperan que la medida ayude a estabilizar la compleja situación.

Soldados estadounidenses en Siria,  foto: ČTK / AP / Zoe Garbarino
El entonces presidente de EE.UU., Barack Obama, envió a Siria los primeros soldados en 2015. Fueron especialistas encargados de adiestrar a los combatientes kurdos que luchaban contra el llamado Estado Islámico.

Con el correr del tiempo su número aumentó a 2000 soldados estadounidenses, miembros de tropas terrestres. Ahora el presidente Donald Trump espera que en el plazo de tres meses todos sus soldados abandonen Siria.

El ministro de RR.EE. checo, Tomáš Petříček, expresó que espera que los pasos dados por Washington cumplan las expectativas.

“Resulta evidente que nuestro mayor aliado en la lucha contra el terrorismo internacional alcanzó sus objetivos estratégicos y militares en Siria. Con ayuda de las fuerzas locales acabaron con el último bastión del llamado Estado Islámico. Si la medida ayuda a estabilizar la situación en el país y conduce a una solución política del conflicto, por supuesto que saludamos semejante paso”.

Donald Trump,  foto: ČTK / AP / Evan Vucci
Para el primer ministro Andrej Babiš, la decisión de la Casa Blanca se puede entender como un cambio de modalidad en la lucha.

“Desde hace algún tiempo observamos que el Gobierno de Estados Unidos no está muy activo en lo referente a su presencia en Siria. Han decidido luchar de otra manera, no con su participación directa en Siria”.

De acuerdo con la BBC, la política de EE.UU. ha desempeñado un papel importante en lo que ha sido el fortalecimiento de los grupos kurdos en el norte de Siria. Y precisamente estos grupos han representado un aporte fundamental en la derrota del Estado Islámico.

La decisión del presidente Trump ha topado con críticas en diferentes sectores políticos estadounidenses y de la comunidad internacional, que temen que la retirada de Siria pueda llevar al rebrote del llamado Estado Islámico. Otro de los temores expresados es que la ausencia de los militares estadounidenses sirva para que Irán y Rusia incrementen su influencia en la zona.