Nuevas tensiones entre el Gobierno y el Presidente de la RCh
El primer ministro checo, Jirí Paroubek, acusó al presidente de la República, Václav Klaus, de respaldar abiertamente a la oposición. Tal fue la reacción de Paroubek al discurso pronunciado por Klaus con motivo de la Fiesta Nacional de la República Checa, el 28 de octubre.
El discurso de Václav Klaus fue sometido a una profunda crítica por parte del primer ministro checo, Jirí Paroubek, quien señaló que el presidente destacó exclusivamente los temas controvertidos que dividen a la opinión pública checa. Otros ministros acusaron al presidente de aprovechar su discurso para propagar la política del oposicionista Partido Cívico Democrático, con miras a las próximas elecciones parlamentarias del 2006.
El presidente Klaus advirtió en su discurso sobre la burocracia y la limitación de las libertades cívicas por parte del poder estatal.
"No puedo estar de acuerdo con que en este país y en el resto de Europa se amplíe cada vez más la tendencia de las regulaciones, prohibiciones y directrices. No estoy dispuesto a aceptar que en la República Checa se respalde a personas que tratan de aprovechar los resultados de los esfuerzos laborales de los demás en beneficio propio", dijo en su discurso Václav Klaus.El primer ministro, Jirí Paroubek, no obstante, insistió en que el presidente debería tomar en consideración la opinión mayoritaria de la opinión pública checa y no recurrir a la propagación de ideas e intereses de una de las formaciones políticas de la oposición.
Personeros del oposicionista Partido Cívico Democrático rechazaron las críticas del Gobierno y calificaron el discurso de Václav Klaus con motivo de la Fiesta Nacional de la República Checa como una de sus mejores intervenciones. Insistieron a su vez que es un deber del presidente de la República descubrir y advertir sobre los problemas que el Gobierno trata de ocultar ante la opinión pública.