• 09/09/2001

    El Embajador checo ante la Unión Europea, Libor Secka, rechazó la exigencia del Parlamento Europeo de convocar a una conferencia internacional dedicada a evaluar las posibilidades del cierre de la central nuclear de Temelín, en Bohemia del Sur. El Gobierno checo confía en que por medio de diálogo se había logrado atenuar las tensiones con respecto a la central con Austria y Alemania que son mayores críticos de la central. Sin embargo, algunas fuerzas políticas de Austria continúan tratando vincular la central de Temelín con el ingreso de la República Checa a la Unión Europea, constató Libor Secka.

  • 08/09/2001

    El Centro Europeo para los Derechos de los Gitanos elabora una demanda contra Gran Bretaña y la República Checa a causa de los controles que funcionarios de Migración británicos efectúan en el aeropuerto internacional de Praga. Según dicho centro, los controles violan la Declaración Universal de los Derechos Humanos y también el Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y Libertades Fundamentales. La demanda principal sería presentada contra Gran Bretaña, porque la República Checa es considerada como cómplice al permitir los controles en su aeropuerto.

  • 06/09/2001

    El Parlamento Europeo ha aprobado una resolución sobre la RCH que contempla la posibilidad de cerrar la central nuclear de Temelín, en Bohemia del Sur. El documento se expresa positivamente acerca del estado de los preparativos de la incorporación de la república Checa a la Unión Europea, pero también exhorta a la Comisión Europea a estudiar la posibilidad del cierre de la planta y a convocar una conferencia internacional sobre el tema. Los adversarios austríacon de Temelín han aplaudido la resolución del Parlamento Europeo.

    Por su parte, diputados checos han adoptado una postura negativa o reservada al respecto. El presidente de la Cámara Baja, Václav Klaus, ha declarado que no puede aprobar la resolución porque faltan en ella argumentos en contra de la puesta en marcha de la central. Klaus ha seoalado que el debate sobre Temelín se ha transformado en un asunto político y que en Europa hay decenas de reactores nucleares mucho más antiguos y nadie propone organizar conferencias internacionales acerca de su funcionamiento.

    Autor: Marta Kosslova

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