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El presidente de la República Checa, Václav Klaus, recibió este lunes en Praga al rey Abdalá II de Jordania. Durante el encuentro fue debatida la situación internacional, centrándose la atención en el conflicto bélico en Irak. El soberano Abdalá II reiteró que soldados de Jordania no integrarán las unidades internacionales que operan en Irak, matizando que una postura similar deberían adoptarla todos los países que limitan con Irak. Abdalá II señaló que, excluyendo el sector militar, su país está dispuesto a brindarle al pueblo iraquí todo tipo de ayuda. Uno de los temas tratados fue también la cooperación económica entre la República Checa y Jordania. El rey Abdalá II de Jordania visitó Praga en el marco de su actual gira por Europa.

Con renuncia amenazó el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Zdenek Skromach, en caso de que no sean aprobadas sus propuestas para el aumento de pensiones y de subsidios familiares. Representantes de los partidos de la coalición gubernamental, la Unión de la Libertad y la Unión Democristiana-Partido Popular, señalaron que para la realización de la idea carece dinero en las arcas estatales. Además, calificaron como una forma de presión inaceptable la amenaza con renuncia del ministro Skromach.

En una galería de arte bajo cielo abierto se transformó a partir de este lunes la plaza Venceslao, en el centro de Praga. Hasta septiembre próximo en la plaza se presentan obras de artistas de doce países que participan en el festival internacional Grandes Esculturas 2004. En pleno centro de Praga aparecieron así 26 nuevas esculturas de gran tamaño. La actividad tiene lugar con motivo del reciente ingreso de la República Checa en la Unión Europea. El arte escultórico checo está representado en el festival por la obra de Milan Knízák, director de la Galería Nacional de Arte, de Praga.

Los senadores Helena Rognerová y Richard Falbr, candidatos para las euroelecciones por la Unión de los Demócratas Liberales y la Socialdemocracia, respectivamente, expresaron en un debate televisivo su acuerdo con la idea de hacer constar en la Constitución de la Unión Europea una alusión a las raíces cristianas de Europa. Siete países miembros de la Unión, incluyendo la República Checa, remitieron una propuesta al respecto a Irlanda, que preside la Unión Europea en la actualidad. La carta que propone una referencia al cristianismo en la introducción de la Constitución de la Unión Europea fue firmada hasta el momento por Polonia, Italia, Lituania, Malta, Portugal, Eslovaquia y la República Checa.

Sobre la Carta Magna Europea debatieron desde el viernes en Praga representantes de la Unión de los Federalistas Europeos. En una resolución titulada "Declaración de Praga" expresaron su apoyo a que la Constitución Europea sea aprobada ya en junio.