República Checa hace frente a otro arbitraje
La República Checa fue acusada por la empresa luxemburguesa EMV de que sus inversiones en el monto total de unos 33 millones de euros no han cumplido con su cometido.
"El proyecto contaba con la transformación de la cadena televisiva regional en cadena nacional, pero sólo por cable o vía satélite. Por ello, la empresa EMV quiso hacerse con la licencia de Martin Kindernay y hasta fueron formalizados varios acuerdos que no se cumplieron lo que llevó a la empresa luxemburguesa a pedir una indemnización de la República Checa," comentó el experto en medios de comunicación, Milan Smíd de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Carolina.
Kindernay finalmente no vendió su licencia a la empresa EMV y el proyecto fracasó. La empresa luxemburguesa acusó de actuación ilegal al Consejo para las Emisiones Radiofónicas y Televisivas que le rechazó traspasar la licencia para las emisiones.
"El titular de la licencia, Martin Kindernay fue propietario de la empresa luxemburguesa EMV. Sin embargo, el Consejo comprobó que la posición de Kindernay en la empresa era puramente formal. Por ello, el Consejo llegó a la conclusión de que no había garantía de que Martin Kindernay tuviese influencia sobre la programación y la responsabilidad por las emisiones, tal como lo requiere la ley," explicó Petr Pospíchal, presidente del Consejo para las Emisiones Radiofónicas y Televisivas.
No es el primer arbitraje al que debe hacer frente la República Checa. Hace dos años, la empresa estadounidense CME ganó el litigio por la inversión malograda en la cadena televisiva comercial Nova, recibiendo por ello de las arcas estatales unos 330 millones de euros.
El arbitraje entre la empresa luxemburguesa EMV y la República Checa entrará en su fase decisiva en otoño al ser nombrados los jueces respectivos.
