En la República Checa hay más gasolineras que en Alemania

Foto: Tomáš Adamec

La República Checa dispone del mayor número de estaciones de gasolina a nivel europeo en proporción con la densidad de sus habitantes. Esto se debe a que prácticamente no existe limitación alguna para la construcción y explotación de las gasolineras.

Durante el régimen comunista circulaban en Chequia relativamente pocos automóviles y las estaciones de gasolina eran escazas y con horario limitado al público. Hoy la República Checa ocupa el primer lugar de Europa en el número de gasolineras por habitante. Con una población de más de 10 millones de personas hay en el país unas 4.500 estaciones de gasolina.

Muchas veces se encuentran a escasos metros de distancia unas de otras. Muy generalizado resulta que en un tramo de 11 kilómetros compitan servicios de hasta cinco gasolineras.

Una de las razones las explica el director de la Asociación de la Industria Petrolífera, Václav Loula.

Foto: Tomáš Adamec
“El mercado checo no impone ningún tipo de limitación, al menos por el momento. Todo el que cumpla con los requisitos necesarios puede poner a funcionar una estación de gasolina“.

Para ilustrar la cantidad de estaciones de gasolina que funcionan en Chequia se puede tomar una distancia similar entre dos ciudades checas Praga y Brno por un lado y Fráncfort y Núremberg, en Alemania, por otro. En el primer caso hay 31 estaciones de gasolina, mientras que en el segundo únicamente 11.

Según algunos expertos su elevado número responde, además de la libertad del mercado, al hecho de que el avance tecnológico ha bajado el precio de los contenedores de carburantes reduciendo así los costes generales.

A pesar del gran número de gasolineras, sus dueños insisten en que se trata de un negocio rentable.

Foto: Tomáš Adamec,  ČRo
En Alemania, con una de las economías más fuertes de Europa hay una gasolinera para 5714 personas, mientras que en la República Checa hay una estación de gasolina para 2430 personas.

Llamativo resulta también el hecho de que en Chequia hay un significativo número de gasolineras en manos de grandes empresas e instituciones para uso exclusivo de sus empleados.

Se estima que este tipo de ‘gasolineras especiales’ puede llegar a 2.600 y representan un dolor de cabeza fiscal, puesto que el Ministerio de Finanzas asegura que desconoce la cantidad real de carburantes que fluye en esos lugares.

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