El pasado fin de semana dejó treinta muertos en las carreteras checas
Aumenta el número de muertos en las carreteras checas. Especialmente el pasado fin de semana arrojó un saldo trágico: durante los accidentes de tráfico fallecieron 30 personas.
Una escena parecida, la región morava de Vsetín: Un automovilista ebrio atropelló a una ciclista que falleció a consecuencia de las heridas.
Dominado por los efectos del alcohol estuvo también un jóven que en la región de Jihlava regresaba con su novia de una discoteca chocando contra una casa; la chica murió. El jóven no poseía carnet de conducir.Estos accidentes no fueron los únicos que se cobraban vidas. En las carreteras fallecieron el pasado fin de semana en total 30 personas, seis de ellas por choferes ebrios. El pasado fin de semana se inscribió como uno de los más trágicos del año en curso.
Las estadísticas policíacas confirman que los choferes checos manejan de manera cada vez más agresiva e irresponsable. ¿Quién tiene la culpa? El ministro del Interior, Stanislav Gross, sostiene que la ley que hace dos años privó a los guardias de la Policía de la competencia de quitar en el lugar el carnet de conducir al chófer que inflija seriamente las reglas de circulación. En vez de ello, lo único que el policía puede hacer es informar a las autoridades locales correspondientes que iniciarán los trámites respectivos.Sin embargo, parece que la situación en las carreteras checas podría mejorar. La Cámara Baja pronto empezará a deliberar sobre una enmienda a la ley que debería devolver varias competencias a la Policía que le fueron quitadas hace dos años.