La Policía dice tener a los responsables de la intoxicación de alcohol adulterado

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La ‘ley seca’ ve la luz al final del túnel. La Policía dice haber encontrado a los mayores responsables de la intoxicación y en cuestión de días se levantará la prohibición y se podrán incluso volver a vender las botellas que aguardan en los almacenes de negocios de todo el país. Pero las industrias licorera y hostelera se quejan de la gestión del Gobierno que les provoca millonarias pérdidas a diario.

Martin Červíček,  foto: ČTK
La Policía ha presentado cargos contra 42 personas hasta el momento en relación a la intoxicación masiva por alcohol metílico que en este mes ha provocado ya 25 muertes y decenas de enfermos, que en muchos casos tendrán lesiones de por vida, especialmente ceguera. De los acusados, 22 permanecen en prisión preventiva. El presidente de la Policía, Martin Červíček, aseguró en la Televisión Checa este domingo que la primera etapa de la investigación ha llegado a su fin.

“Hemos dado en relativamente poco tiempo con los que creemos están arriba del todo en la pirámide de la producción de alcohol adulterado. Es algo que tenemos claro en el momento actual”.

Aunque la investigación no ha terminado y permitirá seguir trabajando en el desmantelamiento del mercado negro de bebidas alcohólicas, aseguró Červíček. Un buen fin que para la industria del licor llega tarde y mal, se denuncia agriamente desde el sector. Ellos llevan años advirtiendo de la existencia de ese poderoso mercado negro que produce una de cada cuatro o cinco botellas de las que se consumen en el país, dicen.

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Vladimír Steiner, director ejecutivo de la Unión de Productores y Distribuidores de Bebidas Alcohólicas apuntó este domingo incluso a la Policía y a los servicios aduaneros como los primeros culpables de la intoxicación.

Los productores no solo han tenido que pelear durante décadas con la industria ilegal, sino que tienen que afrontar ahora pérdidas millonarias por la ‘ley seca’ que desde el día 14 de septiembre no permite la venta de ninguna clase de bebida con un contenido alcohólico por encima del 20%.

Además hay que sumar la prohibición de exportación que impuso el propio Gobierno el jueves pasado y que supone el 40% del total de la producción nacional en condiciones normales.

Los nuevos precintos para las botellas, que deberían estar disponibles este miércoles, además de los logros de la investigación policial, deberían permitir desde esta misma semana suavizar la prohibición.

Petr Bendl
Otra cuestión es qué se hará con los 21 millones de botellas que estaban en circulación en el país en el momento de declararse la ‘ley seca’. El ministro de Agricultura, Petr Bendl, cree que la mayor parte volverá a la calle pronto.

“Hay una parte del alcohol almacenado que se podrá poner en circulación rápidamente, que representa el 70% del total. Cuando se certifique que esas botellas provienen de un alcohol seguro, podrán ser puestas a la venta en el momento en que se cambie el régimen de ‘ley seca’ que actualmente está en vigor”.

La industria se plantea pedir indemnizaciones por los daños sufridos. Las grandes cadenas de distribución calculan las pérdidas en dos millones de euros diarios, el sector de la hostelería en algo menos, 1.725.000 euros al día. Ambos se preguntan por qué la prohibición afecta también a bebidas importadas, de las que hay razón alguna para sospechar.

Los productores nacionales harán su propio cálculo y se plantean pedir indemnizaciones, aunque lo más importante es poder volver a vender, recuperar la buena imagen tanto dentro como fuera del país, y exportar, aunque para eso no bastará el levantamiento de la prohibición en Chequia. Tendrá que ser también la Unión Europea la que de luz verde. Además, Polonia y Eslovaquia prohibieron las importaciones de bebidas checas de forma unilateral y no se sabe por cuánto tiempo la mantendrán.