Golden Gate Quartet dirá adiós en ‘Festividades de San Venceslao’
Himnos de coronación compuestos para reyes ingleses inauguran este jueves en Praga las ‘Festividades de San Venceslao’. Este festival de música religiosa, que evoca el legado del patrono de la nación checa, entra en su edición número 18.
Ocho conciertos, más dos excursiones musicales al monasterio de Bechyně y al lugar de peregrinación Klokoty, cerca de Tábor, figuran en el programa de las ‘Festividades de San Venceslao 2009’.
Según apunta la directora del festival, Blanka Karnetová, los organizadores se esfuerzan por un carácter ecuménico de los conciertos.
“Los visitantes podrán escuchar música de Georgia, interpretada por el grupo folclórico Lashari. Por primera y quizá última vez llegará a Praga la leyenda del gospel estadounidense, The Golden Gate Quartet. Este cuarteto está en los escenarios desde hace más de 70 años y para este año anunció una gira de despedida”.
Otro estreno será la presentación del oratorio Ner Mitzva, del israelí Elli Jaffe, que desde hace varios años es director honorífico de la Orquesta Sinfónica de Praga FOK. Su nueva composición refleja la obra del célebre rabino praguense Löw.
Como parte de las ‘Festividades de San Venceslao’ está instalada en el Ayuntamiento de la Ciudad Nueva de Praga una exposición retrospectiva de obras gráficas, pinturas y retratos de Josef Saska. El artista, que acaba de cumplir 60 años, se inspira en la música, según cuenta.
“El 2008 fue el año de la música española en la Radio Checa. Fue interesante que se haya presentado ante todo la música antigua del barroco, algo bastante desconocido para los checos. Me animó mucho porque me di cuenta que Europa es muy rica gracias a su diversidad. Para mí fue un medicamento para ese vacío que siento a veces cuando se repiten constantemente los conciertos de la música moderna”.
‘Festividades de San Venceslao’ será clausurado el 27 de septiembre con un concierto en la iglesia de San Nicolás, en la Ciudad Pequeña de Praga. Los asistentes escucharán ‘Te Deum’, de Antonín Dvořák, que el compositor escribió para festejar el 400 aniversario del descubrimiento de América. Esta composición acompañó a finales del año 1989 la misa que se ofició en la catedral de San Vito en Praga con motivo de la investidura del presidente Václav Havel.
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