Familiares visitaron a ciudadanos checos encarcelados en Cuba
Las autoridades cubanas permitieron que familiares de los checos encarcelados en La Habana les visitarán este domingo en prisión. A la capital cubana viajaron la esposa del diputado Ivan Pilip y el hermano de Jan Bubenik.
Los ciudadanos checos Ivan Pilip y Jan Bubenik fueron encarcelados el pasado 12 de enero por haberse reunido con representantes de la oposición interna al régimen de Fidel Castro.
Después de una semana de incomunicación las autoridades cubanas permitieron que Lucie Pilipová, esposa del diputado Pilip, y Martin Bubenik hermano de Bubenik les visitarán en prisión.
"Se encuentran bien. Su esta físico y psíquico es bueno. Están en celdas separadas de unos seis metros cuadrados que comparten con otras tres personas", sostuvo el portavoz Pospisil, refiriéndose a informaciones procedentes de la misión diplomática checa en La Habana.
Según diera a conocer el encargado de negocios checo en Cuba, Josef Marsicek, el encuentro con los familiares fue de unas tres horas y las autoridades cubanas informaron que permitirían visitas diarias. El gobierno checo ha tomado medidas para facilitar todo el respaldo jurídico necesario para sus ciudadanos arrestados en Cuba.
"Ya escogimos a un abogado que habla perfectamente español, y que pronto enviaremos a Cuba. Hay que tomar en cuenta que la ayuda jurídica oficial debe contratarse en Cuba, por lo que contactamos a varios abogados que nos ayudarán en el caso de los ciudadanos Pilip y Bubenik", acotó Ales Pospisil.
La detención de los ciudadanos checos ha repercutido a nivel internacional. Gobiernos de diversos países y organizaciones cívicas han pedido al Gobierno cubano que ponga en libertad a los checos encarcelados.
El ministerio de RR.EE. alemán se sumó a la campaña a favor de los checos y entregó el sábado una nota oficial al embajador de Cuba en Alemania, Marcelino Medina, en la que se pide la liberación inmediata del diputado Pilip y del antiguo líder estudiantil Jan Bubenik.
La reacción no se hizo esperar. Cuba respondió que rechaza toda injerencia, presión o intimidación externa para poner en libertad a los ciudadanos checos, que serán sometidos a la justicia por violar las leyes cubanas.
En la nota oficial del gobierno cubano se sostiene que La Habana "no puede aceptar acciones que menoscaben su soberanía, que violen sus leyes y que atenten contra su integridad e independencia".
Hasta el momento el arresto de Pilip y Bubenik no ha sido sustentado con prueba alguna. Los ciudadanos cubanos que recibieron a los checos en Ciego de Ávila han negado categóricamente haber recibido de ellos materiales de propaganda subversiva o dinero, como asegura el régimen cubano.
