El Sparta ovacionado pese a la derrota frente al Villareal
El Sparta de Praga no ha logrado superar sus límites y se despidió de la Europa League tras caer en la vuelta de los cuartos de final ante el Villareal por 2-4. Pese a la derrota, que dejó el resultado global en un 3-6, el club praguense vivió una noche histórica y se fue con la frente en alto ovacionado por la hinchada.
El Submarino Amarillo en la capital checa pronto puso fin a las esperanzas de los locales de que una victoria por la mínima les habría bastado para hacerse con el pasaporte a las semifinales.
Al igual que en España, Bakambu abrió el marcador nada más empezar el partido, en el minuto 5. No obstante, el gol tempranero no hizo desplomarse al Sparta que se puso a buscar con insistencia el empate.
“Hoy ha sido un partido contrario al jugado en Villareal. Nos hemos creado bastantes ocasiones para marcar. En el primer tiempo hemos jugado bien, hemos presionado al rival, pero por desgracia fuimos nosotros en recibir un gol tras otro. Ellos lo materializaron todo. Queríamos mostrar nuestro juego activo y creo que lo logramos. En los partidos anteriores nosotros fuimos los eficaces, por ejemplo, en la cancha de la Lazio marcamos tres goles de tres oportunidades en el primer tiempo. Por desgracia, ahora ha sido al revés”, dijo.
Dos regalitos para las fantásticas gradas
No obstante, los checos la evitaron. Apoyados por las gradas, que no dejaban de animarles frenéticamente incluso con el marcador tan adverso, los locales lograron maquillar el resultado con dos dianas de Dočkal y Krejčí.
Al final del encuentro la hinchada ovacionó al once praguense, diezmado por numerosas bajas debido a las que el Sparta terminó el partido con el once titular inicial, sin sustituciones, por contar en el banquillo prácticamente solo con jugadores de la categoría júnior.
Pese a la derrota, el entrenador Zdeněk Ščasný se mostró más que satisfecho por haber llegado hasta los cuartos de final de la Europa League, todo un éxito que le gustaría repetir la próxima temporada.
A pesar de quedar torpedeado por el Submarino Amarillo este jueves, el Sparta logró un resultado histórico al avanzar hasta los cuartos de final de las copas europeas, lo que había logrado solo dos veces en los años 80.
Terminada la cabalgata por Europa, en la que el Sparta había dejado fuera entre otros al Krasnodar ruso y la Lazio italiana, los rojos ahora podrán concentrarse plenamente en la persecución del Pilsen en la liga checa. A seis partidos para el final del torneo nacional, el Sparta, con un partido menos, se sitúa nueve puntos por debajo del líder de la clasificación.
Vuelta de los cuartos de final de la Europa League, 14 de abril, Praga:
Estadio: Generali Arena. 18.000 (lleno).
Árbitro: Martín Atkinson (Inglaterra) amonestó con tarjeta amarilla a Krejčí, Frýdek, Juliš, Kováč, Konaté y Lafata (Sparta); y Soldado y Castillejo (Villareal).
Goles: 0-1, Bakambu, min. 5; 0-2, Samu Castillejo, min. 43; 0-3, Bruno, min. 45; 0-4, Bakambu, min. 48; 1-4, Dočkal, min. 65; 2-4, Krejčí, min. 72.
Sparta, 2: Bičík; Mareček, Kováč, Frýdek; Konaté, Dočkal, Matějovský, Krejčí; Juliš, Lafata, Fatai. Entrenador: Ščasný.
Villareal, 4: Aréola; Gaspar (min. 57, Costa), Bailly, Ruíz, Rukavina; Suárez (min. 66, Baptistau), Trigueros (min. 61, Dos Santos), Bruno Soriano, Samu Castillejo; Bakambu, Soldado. Entrenador: Marcelino.
