El Gobierno checo da un ultimátum al fabricante de los aviones CASA
En caso de que el fabricante no repare debidamente los aviones CASA adquiridos por la Fuerza Aérea Checa, el Gobierno romperá el contrato de la adquisición. Así lo afirmó el ministro de Defensa, Alexandr Vondra, y agregó que a la parte checa se le acabó la paciencia.
“Nuestra paciencia tiene sus límites. Remitimos al fabricante y al proveedor una carta reclamando la reparación de todos los defectos, ya que ni uno de los cuatro aviones es capaz de cumplir las tareas para las que han sido adquiridos. No podemos utilizar estos aviones en las misiones en el exterior, por ejemplo en Afganistán. En caso de que estas reclamaciones no sean solucionadas debidamente y a tiempo, propondré al Gobierno que anule el contrato en toda su extensión”, dijo.
El jefe del Estado Mayor, Vlastimil Picek, a fines de octubre ordenó que los aviones permanecieran en tierra debido a sus repetidas averías. Los aviones acusaban problemas a largo plazo con respecto a la integración del sistema de protección pasiva y el software. La gota que rebosó el vaso fue un defecto en el motor detectado en uno de los aparatos poco antes de su aterrizaje.El Ejército solicitó en repetidas ocasiones al fabricante Airbus Military y al proveedor Omnipol que solucionen los problemas, pero hasta la fecha sin resultado satisfactorio.
“Ambas compañías reconocen los problemas señalados, pero desde nuestro punto de vista, les han restado importancia. No podemos y no queremos aceptar otros inconvenientes”, dijo Vondra.
En agosto pasado, el Ministerio de Defensa impuso sanciones al proveedor de los aviones, la empresa Omnipol, que debe pagar una multa por cada día de demora relacionada con la reparación de las averías.Vondra además suspendió la venta de los obsoletos aviones Antonov An-26 que debían ser reemplazados por los aparatos españoles. Se especula que en caso de anular los contratos sobre la adquisición de los CASA, la Fuerza Aérea volvería a dar de alta los aparatos rusos.