Chequia honra a las víctimas del peor atentado de su historia

Banderas a media asta este sábado en la República Checa en tributo a las víctimas mortales del atentado del pasado jueves en la Facultad de Filosofía de la Universidad Carolina de Praga, pero también al padre del atacante, muerto horas antes en su casa, y al padre y su bebé asesinados la semana pasada a las afueras de Praga. El examen de balística demostró este viernes que el arma usada en ese doble asesinato también pertenecía al autor del atentado de la Universidad.

En la jornada de luto nacional decretada por el Gobierno, a las 12 horas del mediodía se guardó un minuto de silencio en el país y las campanas de las iglesias repicaron por los fallecidos. En la Catedral de San Vito del Castillo de Praga una misa fúnebre con la presencia del presidente de la República, Petr Pavel, y el presidente del Senado, Miloš Vystrčil. En muchas otras ciudades del país se celebran misas en recuerdo de las víctimas. Las ciudades han cancelado o modificado sus eventos en estos días de Adviento.

El atentado del jueves, que se cobró 14 víctimas mortales en Praga, es el más trágico de la historia del país. Además, hay que sumar la muerte del padre del agresor horas antes en su casa y, como se demostró este viernes tras ser realizadas las pruebas de balística, también el padre y su bebé asesinados la semana pasada en el bosque de Klánovice, a las afueras de Praga, están directamente relacionados con él, ya que el asesinato se cometió con una de sus armas. En el tiroteo de la Universidad, también resultaron heridas 25 personas, diez de ellas de gravedad que se están recuperando en varios hospitales de Praga.